La negación de Dios, óleo sobre lienzo 100 x 81 cm.
The denial of God, oil in canvas 100 x 81 cm.
La négation de Dieu, huile sur toile 100 x 81 cm.
Obra original, única y firmada de Yolanda Molina Brañas. Se incluye Certificado de Autenticidad firmado por la artista.
El cuadro es una composición figurativa con desnudo masculino, con dos figuras marcando una diagonal que va desde la oscuridad (las alas negras del demonio) a la luz (el camisón blanco de la mujer)
El escenario es una habitación vacía, desnuda, donde no hay ni siquiera sábanas, sólo un colchón desnudo. Bajo la cama hay libros, fotos, una muñeca antigua sin vestido y un pájaro muerto. La figura del demonio es masculina y carnal, con peso y presencia dominando el cuadro, como satisfecho de su triunfo. La figura humana es pequeña, angustiada y se retuerce las manos, con la mirada fija en el suelo.
El demonio según la tradición cristiana y occidental busca lograr que el hombre niegue a Dios, que no crea en él. Para mí eso simboliza la pérdida de fe, de felicidad, de todas las cosas luminosas, bellas y buenas que hay en el mundo. Es la ausencia de esperanza y de ganas de vivir. En esta pintura lo he expresado literalmente; el demonio obliga a la mujer a bajar la cabeza para que no mire por la ventana, apartando su mirada de la luz.
Los objetos amontonados debajo de la cama representan la vida interior, los pensamientos de la figura femenina, con una visión negativa y angustiada, quizás representan las cosas que la han llevado hasta ese punto de desesperanza. Fracasos, tristezas, páginas desordenadas de la vida, sueños rotos o abandonados. En este sentido pienso que es una idea universal, porque todos tenemos o hemos tenido demonios detrás y tristezas, fracasos y pájaros muertos bajo la cama.
La esperanza que puede quedar al mirar esta composición es el camisón blanco de la mujer, que representa que tiene alma, que aún tiene algo que vive con la luz. Aunque el demonio la haga bajar la cabeza, la luz que entra por la ventana la sigue iluminando.
Del Informe de valoración:
«Con un título poderoso y un estilo visual impactante, esta pieza presenta una escena cargada de simbolismo en un entorno que combina lo onírico con lo realista.
Este trabajo se enmarca dentro de una corriente de arte contemporáneo figurativo con un fuerte contenido conceptual. La representación de la figura angélica masculina desnuda junto a una mujer en una postura sumisa frente a la ventana parece evocar temas de control o poder. El contraste entre la musculatura y fortaleza del ángel frente a la aparente fragilidad de la mujer, así como la paleta de colores fríos y apagados, añade una gran tensión emocional a la obra.
Este óleo sobre lienzo demuestra gran dominio del medio. En esta obra se observa un manejo preciso en la representación de detalles anatómicos, especialmente en la figura masculina, lo cual evidencia una clara formación artística en figura humana por parte de la autora. El uso de sombras profundas y colores fríos como grises y marrones crea una atmósfera opresiva.
La composición central sitúa al ángel como dominante, no solo por su tamaño y musculatura sino también por su posición y ejercicio de poder sobre la mujer. Además, el uso de líneas diagonales —como las del ala del ángel y la cama— provoca una atracción hacia los personajes, mientras que la luz que entra desde la ventana rompe con esa tensión, simbólicamente ofreciendo un escape o alternativa. El título de la obra, «La negación de Dios», lleva irremediablemente a una interpretación filosófica o espiritual.
El ángel, comúnmente una representación de la divinidad en el arte, aquí podría estar evocando una rebelión o alejamiento del dogma. La postura sumisa de la mujer, cuya atención está fijada en un gesto de introspección, refuerza este concepto. El entorno austero, casi claustrofóbico, abunda en detalles significativos, como los libros y papeles esparcidos por el suelo, que podrían simbolizar la búsqueda del conocimiento mundano frente a lo divino, sumando capas de interpretación.
En base a los análisis de mercado y la información proporcionada, situaría el valor de «La negación de Dios» de Yolanda Molina Brañas en un rango muy alto, dado su carácter único, la excelente técnica empleada y la profundidad conceptual de la obra.»
Teresa Ruiz de Azua García noviembre 2, 2024
Impresionante.
La verdad es que es muy impactante. Y los detalles que has elegido (el paisaje rosado del exterior, la mano opresiva sobre la cabeza de la chica, el rostro tan varonil del ángel) son espectaculares.
ymbarte noviembre 2, 2024 — Autor de la entrada
Muchas gracias por el comentario! Me gusta leer lo que dices de los detalles, espero que lo puedas ver al natural pronto 🙂